Buscando al caballero azul

Fabius llegó a la aldea Nun a lomos de su nuevo caballo negro, Brumbar. Era una buena montura, resistente y bastante rápida, parecía valiente, aunque no se els había presentado una buena oportunidad para demostrarlo aún desde que salieron de Devonesh.

Fabius dejó a Brumbar atado en un poste para las monturas, el único de la aldea, pues esta era pequeña. De hecho, sólo había una docena de casas y una posada. Según había leído, aquellla humilde aldea cerca de la Ciudad de Sacro era el lugar dónde nació y se crió Ser Draich. Fabius pensó que era un origen muy humilde para un caballero de tal renombre pero rápidamente recordó que sus propios origenes eran mucho más pobres. "No importa de dónde viene un hombre, sino a dónde desea ir" le había dicho una vez Ser Ryan. Fabius no sabía si aquella frase la había inventado su maestro u otra persona, pero sin duda eran palabras sabias. Pero ahora aquello no importaba, tenía un caballero que localizar y no parecía haber ninguno en la pequeña aldea. Decidió empezar a buscar en la posada, así que entró.

El interior de la posada era un sitio bastate oscuro. Allí dentro sólo había el posadero, un cinquentón bajito, encorvado y tuerto con cara de malas pulgas, y una pandilla de individuos sospechosos que jugaban a las cartas. No parecía que Ser Draich estuviera allí, pero podía ser que el posadero lo conociera.

Pidió una cerveza y se sentó en la barra a bebérsela. No era muy buena y estava caliente, algo no muy agradable dado el calor de Sacro, pero aún así era cerveza, así que Fabius bebió antes de hablar.

//Turin: ganas 6xp por este post//

-Busco... a una persona -dijo Fabius intentando parecer importante.

-¿Y a mi que me importa? -respondió el posadero. La voz que salía de su boca desdentada casi daba dolor al oído.

-Pues que puede que usted conozca a esa persona. Es un... caballero.

-¿Tengo cara yo de caballero? -El posadero parecía de mal humor- Paga la cerveza y vete, estoy trabajando y destorbas.

-Creo que no me he expresado bien... -Fabius lo intentó una vez más- Busco a un caballero que seguro que desea verme. Estoy seguro de que recompensará cuantiosamente a quién me ayude a llegar hasta él.

El único ojo del posadero briló con la luz de la codicia. De repente pareció más dispuesto a colaborar.

-Je je, haber empezado por ahí. Venga, salgamos de este tugurio. No, no hace falta que pague, ser, invita la casa. -entonces se giró hacia los jugadores de cartas, los únicos que quedaban a la posada- ¡Ey, vosotros, fura de aquí! Hoy cierro temprano, así que pagad y marcharos.

Los indeseables hicieron caso omiso del posadero y siguieron jugando y apostando. Los pocos dientes que le quedaban al posadero rechinaron con rabia.

-¡¿No os he dicho que os largueis, patanes?! ¡Fuera de aquí o sacaré la ballesta!

Cómo única respuesta, el que tenía más cara de bruto de todos ellos cojió su jarra de cerveza y se la tiró al posadero. Los otros empezaron a partirse de risa, sin dejar de jugar a las cartas. Algunos hiciero estos obscenos. El que había tirado la cerveza ni siquiero sonrió. Fabius se acercó para ver si el viejo posadero se encontraba bien.

-¿Se ha hecho mucho daño?

-No te preocupes, ser, no es nada - eso decía l anciano, pero su cara había enrogecido de ira, parecía a punto de saltar encima de aquellos tipos. Pero no podía, claro, ellos eran más, más fuertes y más jovenes. Fabius supo que debía actuar.

-Tu -dijo dirigiendose con voz firme hacia el que había tirado la jarra de cerveza- Pidele disculpas a este anciano y lárgate con tus amigos a otra parte.

-¿Y si no quiero? -la voz del maleante era muy grave, casi parecía un troll. Eso no intimidó a Fabius.

-Entonces me veré obligado doblegarte mediante la violencia. -para recalcar sus palabras, Fabius desenvainó su espada larga y se puso en posición de combate.

Entonces, los jugadores de cartas se levantaron. Todos llevaban cuchillos y dagas en las manos, menos el de la voz grave, que sacó de debajo de la mesa un enorme garrote con pinchos.

-¿Doblegarme, caballerito? ¿Tu y quen más?

// Lo suyo sería que ahora Fabius se enfrentara a los malechores y que el anciano posadero le ayudara, entoblando así una amistad. Pero ahora ya no se pueden incluir batallas en las historias. Que hago ¿La describo toda pero sin dados, ni experiencia ni botín? ¿Me dais permiso para poner una batalla normal? ¿O si un mod controla a los bandidos si vale?//

//Turin: he de ser imparcial, si no pueden meter peleas es culpa de ustedes por el abuso que hicieron de esto. Aun asi no veo por que necesites de ello para narrar tu historia, en mi opinion es mejor un post de narracion de la batalla que la batalla en si para tu historia, en general en los eventos trascendetes yo podria intervenir pero actualmente ando con poco tiempo como ya he comentado y no creo que la batalla sea tan importante como para intervenir de la forma que pides. Intentare particiar mas en sus historias, asi pues por lo pronto solo puedes narrarlo, ganas 6 xp por este post//

//Ok, entonces narro la batalla//

-¡Yo sólo me basto para daros vuestro merecido, aunque seais tan cobardes de luchar todos a la vez!

El bandido de la voz grave, que sin duda era el lider, estuvo a punto de perder el control y abalanzarse sólo contra Fabius. Pero, al parecer, era más listo de loque aparentaba.

-¡Brog el gigante no lucha contra alfeñiques como tu! -el lider de los bandidos estalló en risas- ¡Vesquit, acaba con este pequeño caballerito!

uno de los bandidos, que debía de ser el tal Vesquit, se adelantó para combatr contra Fabius. Era un tipo alto, delado y de pelo largo pero muy sucio que blandía dos cuchillos que parecían más bien dos espadones. Los dos combatientes se acercaron velozmente hasta que se encontraron y la canción de acero empezó.

Vesquit intentó apuñalarle en la barriga, pero la armadura resistió, con lo que Fabius vió su oportunidad para atacar con su espada. Con una agilidad sorpendente, su oponente logró agacharse en el momento justo, para luego saltar detrás de él y lanzarle uno de los cuchillos. El arma pasó rozando por el lado de la cabeza de Fabius, pero pasó de largo para ir a clavarse en el cuello de uno de los bandidos que observaban la batalla. A nadie le importó y la batalla continuó. Fabius se abalanzó encima de Vesquit golpeandolo con el escudo y os dos rodaron por el suelo. A ambos combatientes se les cayeron las armas, por lo que empezaron a pelear, aún en el suelo, con puñetazos, patadas y mordiscos. Vesquit le dió dos puñetazos en el estómago a Fabius, pero éste respondió con un tremendo gancho en la barbilla que lanzó a Vesquit hacia atrás. pero el bandido no se iba a rendiry, cuando Fabius fue a por él de nuevo, sacó una pequeña daga de la bota y se la lanzó al caballero. El acero se clavó en el hombro de Fabius, que profirió un grito de dolor. Aprobechando esto, Vesquit recogió la espada de fabius del suelo y se dispuso a rebanarle el cuello. Pero Fabius no era un alfeñique así que logró esquivarlo y saltar encima de él. Volvieron a rodar por los suelos y, finalemente, Fabius acabó encima de vesquit, con la espada recuperada. El bandido, que sabía que iba a morir, empezó a temblar de miedo.

-Me rindo -El bandido chillaba como una niña. De golpe su aspecto fiero desapareció del todo- ¡Oh, por favor, ser, perdonadme la vida, tened piedad!

-Esta vez te dejaré marchar -dijo Fabius levantándose- Pero si vuelvo a veros acabare con todos vosotros.

Vencida la batalla, Fabius se dispuso a marcharse con el anciano, pero, de golpe, la voz de éste leo alertó.

-¡Cuidado, ser!

Fabius se giró justo a tiempo para ver como Vesquit volvía a la carga con uno de los chuchillo en la mano. Por suerte Fabius no había envainado la espada y reacciónó rápido. Al cabo de unas centecimas de segundo, la cabeza de Vesquit rodaba por el suelo de la taberna, manchandolo todo de sangre.

-Ya habeis visto que os he derrotado -dijo Fabius con voz firme al resto de los bandidos- Lo repetiré, marchaos de aquí. No intenteis ningún otro truco sucio, bellacos.

La cara de Borg el Gigante estaba contraída por la ira. Su puño se cerraba tan fuertemente sobre el mango de su garrote que parecía que lo iba a romper. Sus dientes rechinaban y sus ojos parecía que iban a salirse de las cuencas. Finalmente, con su podeorsa voz girtó, al tiempo que señalaba a Fabius con su arma:

-¡Mátadlos a los dos!

Fabius se preparó una vez más para la batalla, a pesar de las heridas, y se interpuso entre los bandidos y el posadero al tiempo que gritaba con decisión:

-¡Un buen día para morir!

//Locke42: 7 px//

//creo que me entrometere en tu historia mi buen amigo//
llego a la posada buscando refugio, en uno de mis viajes por alguna pista de mi hermana menor. al entrar en la posada veo a mi buen amigo fabius dandole la espalda al posadero y con su espada desenvainada, al notar que frente a el habia un grupo de hombres armados.
Simon: fabius, ¿que tal? ¿como te trata la vida?-le digo sinicamente mientras me acerco al posadero-deme una cerveza, por favor.
Posadero: ¿que dice? su amigo esta apunto de enfrentarse a un grupo superior y usted quiere una cerveza.
Fabius: tiene razon ayudame, y hola.
Simon: oigan si se sientan y se callan mientras tomo mi cerveza no habra problema, asi no los matare-con una seña le hago a fabius que mire afuera, donde estan mis tres lobos, con dos hombres pequeños- ahora traigame la cerveza es lo que me recomendo el doctor, mas cerveza y menos sangre.
Borg: estas de broma ¿no? ustedes tres contra nosotros te moleria a palos-cuando uno de sus compañeros lanza una daga, la cual atajo con mis dedos.
Simon: ¿dos? somos 7, 8 si contamos al viejete. muchachos entren-en ese momento entran mis tres lobos y los dos hombres pequeños-si no te molesta te interrumpiremos fabius, ademas aun me siento mal con lo que te hice cuando fuimos por el hada, que dices ¿quieres ayuda o quieres que te veamos luchar?-le dijo lanzandole una sonrisa
//para que sepas los dos hombres pequeños son troles, por si quieres narar la batalla//

//Locke42: 6 px. um.. tenia entendido que los trolls eran mas bien grandes...//

//depende de que troles hables, por ej: los troles del LOTR son diferentes a los de otra mitologia que son un poco mas bajo que los humanos debido a que andan encorvados//

//Turin: En eso tienes razon daz, y de hecho esa es la version clasica del Troll y no la del señor de los anillos ((que mas que nada es una mezcla entre troll y ogro)). Asi mismo esa version encorbada es en la que yo tengo pensados a los trolles de Hyperion.//

//Oh, Simon etá aquí y no lo ví Voy a responder//

¡Ja, ja! -Fabius rió alegremente- Llegais en el momento justo, Simon, esos alfeñiques van a ver lo que es bueno.

Al parecer, los amigotes de Borg no querían saber lo que era bueno, porque, al verse superados, huyeron despavorecidos de la posada. Fabius no había visto nunca a nadie corriendo tan rápido. Puesto que eestaba solo, Borg tuvo que aceptar su derrota. Profirió un gruñido que parecía más propio de un jabalí que de un hombre y se fue a paso firme. Antes de salir por la puerta, se giró hacia Fabius para hecharle una mirada llena de odio.

-Esto no terminará así, caballerito -le dijo señalandolo con el garrote- Algún día, cuando estés sólo y sin amiguetes para salvarte, Borg el gigante vendrá y te hará pedazos.

El lider bandido escupió en el suelo y se fue dando grandes zancadas, sin prisa pero sin pausa. Uno de los amigos de Simon hizo ademán de perseguirlo, pero Fabius le detuvo.

-Dejemos que se marche -dijo mientras envainaba la espada.

-¿Porqué, ser? -preguntó el posadero- Ahora podemos darle su merecido por lo que nos ha hecho.

-No, hoy ya han muerto dos personas y, aunque si fuera necesario acabaría con más, no deseo derramar más sangre aquí. De momento sirvanos una cerveza a todos, invito yo.

El posadero sirvió las cervezas y fabius se sentó en una silla para beberse la suya. Se giró hacia Simon y sus amigos.

-¿Y bien? -dijo sonriendo- ¿Que te trae aquí, Simon? ¿Como va todo? Por cierto, no me has presentado a tus amigos. Los lobos creo que ya los conozco de vista, pero a los otros dos no.

Eran unos seres un poco extraños, como una especie de hombrecillos extraños y pequeñitos. Había a algunos de su raza en alguna ocasión, le parecía que eran trolls.

//Locke42: 6 px, me e perdido alguna parte de tu historia?? por que tenia entendido que aun no eras caballero //çç

//Turin: Es que se encontro al rey arturo en el camino XD, si si, ya se que no da risa, dejadme ser//

tomo la cerveza, pero mi escolta la deja de lado, al oir lo que me pregunta fabius le respondo
Simon: (que cerveza mas suave)disculpa supongo que te los puedo presentar, muestrense tranquilos
Escolta: si señor-se sacan las capas mostrando su forma por lo que el posadero queda sorprendido
Fabius: ¿Señor?
Escolta: Simon Blaze, señor de las bestias, bendecido con la garra de Gudar, lider y campeon de La comunidad, señor de los troles y de las ratas
Fabius: que presentacion por lo que veo te han pasado distintas cosas
Simon: si y no creeras lo que estoy por pasar, y sus nombres pues no me los se no me los han dicho
Fabius: ¿y que haces aqui?
Simon: solo de paseo, dejemos de hablar de mi ¿como estas tu? y ¿que haces aqui?

//Turin: 2xp//

Por un momento, la pelea contra los bandidos de Brog y el encuentro inesperado con Simon y sus escoltas le había hecho olvidar lo que venía buscando y porqué. Decidió que podía contarle a Simon ´su objetivo, aunque solo fuera por encima.

-Pues verás, estoy investigando sobre el pasado de mi maestro, Ser Ryan, y al mismo tiempo intento averiguar todo lo que puedo de una extraña organización sureña que intentó tenderme una trampa. Se hacen llamar "Roedores" pero no son ratas, ni siquiera hombres rata, son hombres oscuros, del sur. Parecen muy interesados en mi maestro y sus compatriotas de batalla. -Fabius se acabó la cerveza. Seguía sin ser de las mejores, pero hablar tanto despertaba sed- Por eso he venido a buscar al último de ellos, el único que queda vivo. Nació aquí, en Sacro, así que decidí empezar a buscar por aquí.

//Turin: Incisto, al final todos van a sacro XD, 3xp//

Dejo la cerveza a un lado, veo a fabius
Simon: "Roedores", no puedo dejar que dejen mal a mis amigos, si quieres te puedo ayudar en lo que necesites, pero antes debo ir a otra parte, te esperare en la plaza al atardecer si deseas qeu te ayude, tengo algunos amigos que pueden tener informacion
Fabius: claro no hay problema
Simon. y a usteded sñor posadero la receta de la mejor cerveza-le entrego un papel, con una pequeña botella- espero que le sirva y bebala de a poco
Posadero: gracias
Simon: me retiro
salgo de la posada seguido de mis acompañantes para desaparecer en la oscuridad de un callejon

//Turin: 2xp//